"No tenemos nada. Necesitamos un nuevo Ejército, una nueva Guardia Nacional y una nueva policía. El Estado ucraniano ahora atiende a estos asuntos. Tenemos que recuperar todo esto, y si tenemos la voluntad, Crimea estará con nosotros", señaló el ministro.
"El proyecto se prepara para que estemos listos para recuperar Crimea", subrayó.
El presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, ordenó más tarde al ministerio de Defensa y al Estado Mayor reforzar sus capacidades en la frontera con Crimea tanto como a lo largo del litoral del mar Negro.
"Le ordeno al ministerio de Defensa y al Estado Mayor presentar las propuestas para un refuerzo drástico de las posibilidades militares de Ucrania a lo largo de la costa del mar Negro", declaró Poroshenko.
Al conocer las declaraciones de los funcionarios ucranianos, el jefe de Crimea, Serguéi Aksionov, las calificó como "material para psiquiatras" y "la locura estacional", informa el medio web ruso Lenta.ru
"Han ‘bloqueado' Crimea por mar, aire y tierra. La próxima será el manicomio, la camisa de fuerza y la aislamiento total de la sociedad", notó.
El mandatario crimeo subrayó que al tener "tanta administración, el Ejército ucraniano nunca se convertirá en una fuerza combativa".
"Ir a la guerra contra el Ejército ruso, el más poderoso del mundo, es una cosa inviable", apuntó.
"En realidad tengo solo una pregunta: ¿Por cuánto tiempo el pueblo de Ucrania va a aguantar a esos payasos sangrientos?", subraya Aksionov.
Los funcionarios crimeos recomendaron a las autoridades en Kiev que "no hagan tonterías y que se preocupen por la economía, la sociedad, piensen en los niños y los ancianos".
El 22 de febrero el Consejo de Seguridad y Defensa Nacional de Ucrania publicó el acta de la reunión del año 2014 en el que las autoridades admitieron que la población local de Crimea apoyó las acciones de la Federación de Rusia.
Crimea se incorporó a Rusia en marzo de 2014 tras el referéndum en la región en el que la mayoría de los votantes apoyó la reunión con Rusia. Kiev rechazó reconocer los resultados del plebiscito, mientras que Rusia, por su parte, considera que el proceso del ingreso de Crimea está en sintonía con el derecho internacional.