"Las mejores propuestas científicas serán financiadas. La UE tiene el deber de solidaridad y de interés propio en ayudar a Brasil en su lucha", explicó Cravinho quien ya anticipó que los programas desarrollados por la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz) y el Instituto Butantan serán los primeros beneficiados al ser los encargados de desarrollar la vacuna contra el virus zika.
Por su parte, el ministro Castro destacó que el gobierno de Brasil actúa con "total transparencia" en torno a sus investigaciones sobre el virus zika y anticipó que el país participará activamente a la hora de "compartir informaciones" y "asociarse con órganos internacional para desarrollar tratamientos y vacunas".
Precisamente, este mismo martes el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) inició un estudio de 50 días para analizar el mayor número de casos posibles de bebés nacidos con microcefalia asociada al virus zika, un total de 54 casos confirmados y 427 bajo investigación solamente en este estado del nordeste de Brasil.
El pasado lunes el ministro Castro afirmó que "no existen dudas" en la relación directa del virus zika con la epidemia de microcefalia registrada en Brasil, una aseveración surgida después de el cuestionamiento realizado por la Asociación Brasileña de Salud Colectiva (ABRASCO) cuyo reciente informe relacionó los casos de microcefalia con el uso del larvicida "pyriproxyfen" en el suministro de agua potable de algunos municipios del nordeste del país.