Este viernes, el grupo de trabajo de la ONU para las detenciones arbitrarias calificó de "ilegítima" la privación de libertad de Assange, e instó a liberarlo y pagarle una indemnización.
Londres expresó desacuerdo con esta decisión y ya adelantó que la impugnará.
"Los Estados que declaran su respeto a los derechos humanos deben si no cumplir sin dilaciones este dictamen al menos escucharlo y empezar a implementar las recomendaciones de la ONU", dijo Ordzhonikidze.
Assange fue detenido en Londres en diciembre de 2010 por solicitud de las autoridades de Suecia, que exigían su extradición para juzgarlo por presuntos delitos sexuales.
Tras ser liberado bajo fianza y agotar todos los recursos para evitar la extradición, Assange pidió asilo en la embajada de Ecuador en Londres en junio de 2012, donde reside desde entonces.
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El australiano teme que las autoridades suecas lo entreguen a EEUU debido a las filtraciones de documentos clasificados, en particular, sobre la guerra del Pentágono en Afganistán.