"Vamos a luchar contra los que quieren construir su Estado dentro del Estado con la excusa de las aspiraciones de autonomía y autogobierno", declaró el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan.
En diciembre de 2015, Ankara declaró el toque de queda en varias localidades de mayoría kurda en el sureste del país, en particular, en Cizre y Silopi de la provincia de Sirnak, en un distrito de la ciudad de Diyarbakir, y también en la ciudad de Nísibis de la provincia de Mardin. En Diyarbakir y Cizre continúan los enfrentamientos entre fuerzas turcas y combatientes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
Según los datos del Estado Mayor de Turquía, desde mediados de diciembre en las regiones de la operación antiterrorista fueron eliminados cerca de 670 combatientes del PKK.
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El PKK está incluido por Turquía, EEUU y la Unión Europea en su lista de organizaciones terroristas.
