La Infanta no podrá utilizar este reconocimiento mientras dure el procedimiento administrativo y "no tendrá derecho al trato de Excelentísima Señora, ni ninguna precedencia protocolaria en cualquiera de los actos oficiales organizados por el Ayuntamiento", según detalla el Consistorio.
Ésta es la primera ocasión en la que el Ayuntamiento retira su máxima distinción municipal.
Otra ocasión similar ocurrió con el expresidente catalán, Jordi Pujol, aunque este "devolvió voluntariamente la medalla".
La propuesta es de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), que argumentó la retirada por la "suma de escándalos que ha salpicado a la monarquía en los últimos años, el desprestigio de la institución y la falta de sensibilidad de la Corona hacia el proceso soberanista".
El primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, lamentó que la Infanta no hubiera renunciado voluntariamente a la distinción.
Para Pisarello, este honor municipal "no puede recaer en una persona que voluntariamente ha aceptado que ha cometido fraude fiscal y que no ha hecho nada remarcable por la ciudad".
Cristina de Borbón y su marido, Iñaki Urdangarin, están imputados en el caso de corrupción Nóos.
Urdangarin está acusado de "prevaricación administrativa, malversación de caudales públicos, fraude a la Administración, tráfico de influencias, blanqueo y dos delitos contra la Hacienda Pública".
Se enfrenta a penas que van de los 19 a los 26 años de cárcel y una multa de 3,5 millones de euros.
En el caso de Cristina de Borbón, la Fiscalía Anticorrupción la acusa de haberse lucrado de parte de más de un millón de euros que percibió de forma irregular la sociedad Aizoon, de la que era copropietaria en el 50 por ciento junto a su marido.
Sin embargo, en el caso de la hermana del monarca, no está previsto que haya penas de prisión.