Richard Mallinson, analista geopolítico en la firma, estima que la producción de petróleo "solo aumentará inicialmente entre 0,25 y 0,4 millones de barriles al día debido a limitaciones técnicas".
El informe enviado a esta agencia advierte además que Teherán "muy probablemente tendrá que ofrecer descuentos" en la venta del crudo, lo cual "es complicado a los bajos precios actuales".
Dada la saturación del mercado, Mallison calcula que Irán ofrecerá "términos favorables", ya sean descuentos o alargamiento de los plazos a pagar, para asegurar compradores.
Las sanciones aún vigentes de Estados Unidos presentan otro problema adicional en el retorno del petróleo iraní a los mercados internacionales.
En este sentido, Mallison identifica las penalizaciones sobre transacciones en dólares como "el obstáculo más grave" a la recuperación de las exportaciones del crudo iraní.
Energy Aspects señala que el principal reto de Teherán a medio y largo plazo será "atraer compañías occidentales que inviertan de nuevo" en su sector energético.