"Varios manifestantes y vándalos, así como varias personas que utilizaron ilegalmente las redes sociales, han sido detenidas en virtud de la declaración del Ministerio del Interior del 2 de enero", señala el comunicado.
Las autoridades bahreiníes, que respaldaron a Riad, advirtieron que castigarían a cualquiera que condene o proteste contra las acciones de Arabia Saudí.
No obstante, los suburbios chiíes de Manama, capital de Bahréin, fueron el domingo escenario de enfrentamientos entre manifestantes, que protestaban contra la ejecución del religioso, y la Policía.
Nimr al Nimr, ejecutado el sábado junto con otras 46 personas, se pronunciaba contra la discriminación de la minoría chií en Arabia Saudí.
El religioso había sido detenido en 2012 durante unas protestas en Arabia Saudí y dos años después un tribunal lo condenó a muerte por incitar a la violencia, desobedecer al rey y supuestamente crear una célula terrorista.
