"Rusia tiene gas, el gas ruso es bastante barato, tenemos la infraestructura correspondiente, y garantizamos que estamos dispuestos a suministrarlo y aumentar el volumen de los envíos", declaró.
El ministro también destacó que la cooperación económica y comercial entre ambos países tiene que seguir adelante, porque "será eficiente para ambas partes".
"Las negociaciones para prolongar el contrato no han comenzado y probablemente no comenzarán antes de que expire el plazo de su vigencia", declaró Nóvak resaltando que Rusia no contraerá un acuerdo a condiciones desfavorables.
Sin embargo, Moscú no persigue el objetivo de cortar el suministro del gas a través de Ucrania, dijo el ministro.
"Creo que la política común que aplican hoy los distribuidores y consumidores de gas tiene que aspirar a conservar el monopolio; esto no significa que renunciemos al transporte a través de Ucrania, debe haber rutas alternativas que permitan competir", afirmó.
Nóvak subrayó que en este caso se crearían condiciones atractivas para ambos distribuidores y consumidores de gas.
