“No sé mucho de política allá abajo, sólo lo que leo en los diarios, pero fue muy interesante ver que ganó”, dijo Eric Trump, de 31 años, en entrevista al diario La Nación de la Argentina.
Relata que su padre conoce al empresario Franco Macri y a su hijo Mauricio, el presidente electo, desde hace varios años.
“Su familia tuvo un departamento en uno de nuestros edificios por un tiempo largo”, explicó.
Trump hijo confesó que espera que el cambio de gobierno en la Argentina mejorará la imagen que tiene el país sudamericano en el mundo empresarial de Estados Unidos.
“No sé mucho del gobierno anterior pero sé que había mucha gente que quería invertir en el país y que era difícil ingresar dinero, sacar dinero, y como extranjero era muy difícil invertir en la Argentina”, afirmó.
Eric Trump expresó al esperanza de que las nuevas autoridades argentinas “abran las puertas para que entren compañías y hagan lindos proyectos”.
Según él, hasta ahora “era muy difícil para la comunidad internacional hacer negocios ahí”.
“Definitivamente espero que eso cambie”, insistió.
Eric augura que, si su padre es electo presidente, “la relación con la Argentina, con tantos lugares, sería genial”.
Por eso, “va a ser un gran unificador para este mundo.”
Trump hijo expuso su proyecto en el balneario de Punta del Este, Uruguay, a donde viajará en enero para supervisar la construcción de la Trump Tower, de 24 pisos, en la playa más exclusiva de la ciudad, que es desarrollada con una empresa argentina, YY Development Group, y cuyo coste está estimado en 100 millones de dólares.
“Será el mejor edificio de América del Sur, no hay dudas sobre eso”, dice. Trump también irá a Río de Janeiro, para ver el primer Hotel Trump de la región, de 171 habitaciones y 120 millones de dólares de inversión, que se inaugurará antes de los Juegos Olímpicos de 2016, y no descarta pasar por la Argentina.
A pesar del violento discurso de su padre contra los inmigrantes, Eric está feliz con sus inversiones en el subcontinente.
“América del Sur ha sido increíble para nosotros. Brasil tendrá este hotel espectacular, lo vamos a estrenar antes de las Olimpíadas. En Punta del Este tendremos el mejor edificio residencial. Si ves la cantidad de argentinos, brasileños, panameños, venezolanos, etcétera, que han visitado nuestro proyecto en Miami, nuestros hoteles en Miami… hemos sido muy exitosos allí abajo y es el lugar en el mundo donde tendremos muchos proyectos”, aseveró.
Trump agregó que “es muy emocionante” invertir en América del Sur, porque “les encanta la marca.
“En América Central y del Sur te dejan construir grandes proyectos, quieren marcas grandes, quieren productos de buena calidad”, explicó.
La familia Trump parece muy pragmática: mientras Donald padre agita en las tribunas contra los inmigrantes latinos, a sus hijos “les encanta” hacer buenos negocios en América Latina.