"Es una violación moral de la ley y un oprobio nacional el que ciudadanos puedan adquirir legalmente instrumentos para un rápido y eficaz asesinato", indica la Redacción.
Los articulistas señalan que las autoridades del país estimulan el desarrollo del mercado de armas, mientras los Estados como Gran Bretaña, Noruega y Francia intentan limitar la venta de armas.
El artículo se publicó tras conocerse la noticia sobre el tiroteo en un centro de asistencia a minusválidos de San Bernardino, donde dos terroristas asesinaron a 14 personas, usando fusiles de asalto.
"Se debe prohibir la venta a la población civil de las armas como fisiles de asalto y de algunas municiones", resumen los periodistas.