El periódico destaca que los servicios secretos rusos detectaron durante este año envíos de ayuda financiera al EI por parte de habitantes rusos por casi 5 millones de dólares.
Una de las vías para reunir el dinero son las redes sociales, donde se abren cuentas especiales para reunir donaciones voluntarias.
En particular, un tal Bulgarski Salman, ciudadano ruso que estuvo preso en la cárcel de Guantánamo por haber participado en el conflicto de Afganistán, se encargaba de reclutar a futuros combatiente del EI y de recaudar dinero en una cuenta en la red para apoyar actividades terroristas.
El diario afirma que Salman, que se hace llamar también Airat Vahidov, luchó en 2013 en Siria en las filas de las tropas opositoras a Bashar Asad, y actualmente sigue su fructífera labor de reclutamiento, lo cual no le impide publicar entrevistas en medios de prensa rusos o aparecer en ellos en calidad de experto.