La página con la caricatura está acompañada por un texto analítico, escrito por el periodista francés Antonio Fiscetti, en el que el autor afirma que el EI no niega sus crímenes, a diferencia de otros actores de las guerras.
"La ventaja de esta situación radica en que no necesitamos denigrar al enemigo… así ahorramos tiempo y energía para eliminarlo", escribe Fiscetti.
En la misma edición de la revista había aparecido otra caricatura, que retrata a un hombre con un vaso y una botella de champán, y la bebida sale por las heridas de las balas en su estómago y piernas, estará acompañado por un letrero "Tienen armas. Que se vayan… Tenemos champán!".
Antes la redacción de la revista, que sufrió un ataque terrorista en enero, en el que perecieron varios de sus empleados, condenó los atentados llamándolos "violencia, que sirve a la ideología totalitaria, cuyo único objetivo es destruir los valores de la democracia y la República".
La noche del viernes se produjo una serie de ataques en seis puntos diferentes de París. Según el balance oficial, los atentados se cobraron la vida a 129 personas y más de 300 resultaron heridas.