Nicaragua, que mantiene cerrado el paso a los migrantes cubanos en su frontera con Costa Rica desde el domingo, formalizó el lunes una denuncia contra ese país ante la Organización de Naciones Unidas.
"Estos acontecimientos ejecutados por el Gobierno de Costa Rica violan todos los principios y objetivos; violan la Carta de Naciones Unidas, violan nuestro derecho nacional, nuestro derecho jurídico, el estado de derecho nacional e internacional", dijo el lunes la vicecanciller de Nicaragua, María Rubiales, en declaraciones recogidas por el medio oficialista 19 digital.
Rubiales también advirtió que Costa Rica impulsa así "una crisis humanitaria, política, económica y social que puede tener implicaciones regionales".
El Gobierno de Nicaragua, presidido por Daniel Ortega, del izquierdista Frente Sandinista de Liberación Nacional, condenó de nuevo el lunes "la actitud irresponsable" de Costa Rica y calificó de "inaudita" su pretensión de "concederse el derecho de determinar el ingreso a nuestro territorio de personas en situación de ilegalidad", según señala el último comunicado oficial publicado en 19 Digital.
Nicaragua también anunció que abordará la crisis este martes en una reunión en la Comisión de Seguridad del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), según informó el lunes la prensa de ese país.
Por su parte, el Gobierno de Costa Rica defendió su postura argumentando "razones humanitarias", informó el lunes el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.
"Estamos ante una situación de atención de personas, el centro de atención para este Gobierno es que tengan un trato digno", explicó Sergio Alfaro, ministro de la Presidencia de Costa Rica.
El canciller Manuel González aseguró también que el ingreso de unas 800 migrantes cubanos a Nicaragua "en ningún momento fue alentado, autorizado o motivado por el Gobierno de Costa Rica".
Por el contrario, "fuimos muy cautelosos en aplicar la legislación", precisó el lunes en ese mismo comunicado.
Largo viaje hacia EEUU
El objetivo de los migrantes cubanos es llegar a territorio estadounidense, ya que la Ley de Ajuste Cubano de 1966, aprobada por EEUU en un contexto de Guerra Fría, les permite la residencia temporal y derecho a trabajar casi de forma inmediata, entre otros privilegios.
El viaje que emprenden estas personas desde Cuba no es sencillo: Primero vuelan desde la isla hasta Ecuador, donde no necesitan visa para entrar, y desde allí se dirigen hacia el norte, cruzando los territorios de Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, Guatemala y México, donde cruzan la frontera para alcanzar suelo estadounidense.
Esta migración se disparó desde que EEUU y Cuba reanudaron sus relaciones diplomáticas en julio, pues muchos cubanos temen perder los privilegios migratorios ofrecidos por la ley estadounidense.
Tema: Normalización de las relaciones entre Cuba y EEUU
La cantidad de cubanos que entraron por el sur de Costa Rica ha aumentado de forma notoria en los últimos años, según datos de Migración y Extranjería citados por el diario estadounidense El Nuevo Herald, pues fueron apenas medio centenar en 2011, unos 1.600 en 2012, llegaron a 2.300 al año siguiente y saltaron a 5.400 en 2014.
En lo que va de 2015, más de 12.000 cubanos ingresaron de Panamá a Costa Rica.
