"Ha sido un proceso de más de tres años de incidencia política de distintas organizaciones, de la cooperación internacional y, en definitiva, de toda una movilización nacional que desde hace unos meses está reclamando cambios en el país", explicó José Roberto Luna, oficial de Juventud del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA) en Guatemala.
El Congreso de ese país centroamericano aprobó el jueves por la noche una modificación al Código Civil que eleva hasta los 18 años la edad mínima para casarse y prohibió también las uniones de hecho con menores de 18 años.
Sin embargo, de manera excepcional se podrá contraer matrimonio a partir de los 16 mediante una orden judicial.
Pese a esa excepción, desde el UNFPA consideran el cambio como un "avance importante" pues las cifras de matrimonios de menores de 18 años en el país son alarmantes: entre 2009 y 20012 aumentaron un 36 por ciento, según datos de este organismo.
"El Código Civil de Guatemala entró en vigor en 1877 y han sido muy pocos los cambios que ha sufrido desde entonces, por eso este cambio es significativo", aclaró Luna.
La ley ya establecía que la edad para casarse en el país centroamericano son los 18 años, pero hasta ahora bastaba con una autorización de los padres para que las niñas pudieran contraer matrimonio a partir de los 14 años y los niños a partir de los 16.
"A partir de ahora esa decisión ya no queda en manos de los padres. La norma establece que los menores deben ser consultados", sostuvo Luna, un aspecto importante teniendo en cuenta que en Guatemala existen "matrimonios forzados, arreglo de los padres y situaciones en las que hay una transacción económica".
Por otra parte, continuó Luna, el Congreso decidió no modificar el Código Penal, que establece que toda relación sexual con menores de 14 años es un delito pese a que diversos sectores sociales pedían aumentar esa edad a los 16 años, pues los legisladores consideraron que así "se niega el derecho a la libertad sexual de los adolescentes".
El matrimonio infantil es muy visible en algunas regiones de África y del sur de Asia, pero también en América Latina y el Caribe es una práctica extendida.
Según las estimaciones del UNFPA, más de 140 millones de niñas contraerán matrimonio entre 2011 y 2020 en todo el mundo, de las cuales 50 millones tendrán menos de 15 años.
