"Lo comprende perfectamente; él mismo, por cierto, señaló que la fase militar de la lucha contra el terrorismo debe ir acompañada por una consolidación de la parte sana de la sociedad y por el comienzo de un proceso político para garantizar que las instituciones públicas tomarán en cuenta los intereses de todos los sirios sin hacer excepciones basadas en la etnia, confesión o convicciones políticas", subrayó en una entrevista con la cadena Rossiya 1.
Lavrov agregó que al solucionar el conflicto en Siria se deben tomar en cuenta los intereses de todas las partes y no solo los del presidente Bashar Asad o los de la oposición.
Anteriormente, Lavrov afirmó que la posición rusa al respecto respondía a una fórmula muy simple: el destino de Siria y del presidente Asad debía ser decidido por el propio pueblo sirio.
El ministro ruso mencionó también que los éxitos que muestran las tropas gubernamentales de Siria con el apoyo de la aviación rusa deben predisponer a Damasco hacia la promoción de la solución política.
"Estoy convencido de que los éxitos que está mostrando el Ejército sirio con el apoyo aéreo ruso permiten consolidar la situación de las autoridades y deben contribuir a que estén más interesadas en la promoción del proceso político", apuntó.
"Estamos dispuestos a coordinar lo máximo posible; es más, estamos dispuestos a atorgar apoyo aéreo a la oposición, en particular, al Ejército Libre Sirio, aunque los estadounidenses se niegan a compartir información sobre dónde se encuentran los terroristas y dónde los opositores", dijo el diplomático al calificar que la negativa de los estadounidenses es "un gran error".
El jefe de la diplomacia rusa aseveró también que la comunidad internacional elogia la ofensiva de Moscú en el país árabe.
"La mayoría de los países ha catalogado nuestra presencia militar en Siria como la respuesta más eficaz a la amenaza terrorista, especialmente en el contexto de la lucha que lleva a cabo la coalición de EEUU desde hace más de un año contra el EI, que en ese periodo ha conquistado más territorios", señaló.
Desde marzo de 2011, Siria vive un conflicto armado que ha causado más de 250.000 muertos, según estimaciones de la ONU.
Las tropas gubernamentales se enfrentan a distintos grupos armados, entre ellos el EI y el Frente al Nusra, vinculado con Al Qaeda.
A finales de septiembre, Rusia inició una operación aérea contra el EI y realizó hasta el momento 830 ataques contra los yihadistas, destruyendo puestos de mando, campos de formación, arsenales, nudos de comunicación y talleres de explosivos.
