"Tenemos 23 detenidos, pero uno de ellos no es servidor público y, aquí lo digo, es un piloto que trasladó a esta persona (…)", detalló la alta funcionaria en una comparecencia ante el Senado del país latinoamericano.
El principal jefe narcotraficante del poderoso Cártel de Sinaloa, también llamado Cartel del Pacifico, se escapó la noche del 12 de junio pasado desde la ducha de su celda en la principal prisión de alta seguridad de México, en la región del altiplano central del país, por túnel de 1,5 km.
En cuanto al apoyo fuera del penal, donde los cómplices construyeron una bodega en una plantación de maíz para construir un túnel y penetrar a la prisión, "estamos por consignar, probablemente la semana que viene, porque ya tenemos todo el mapeo de quienes participaron" en el apoyo externo, dijo ante legisladores la Procuradora.
En 1993, el Chapo fue detenido en Guatemala y entregado a México por tropas bajo el mando del militar guatemalteco Otto Pérez Molina — quien llegó a la presidencia de Guatemala en 2012 —, y ocho años después escapó oculto en una carro de ropa sucia de la prisión de máxima seguridad en Jalisco, en enero de 2001, durante el gobierno de Vicente Fox.
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Durante sus años de prófugo, el mayor capo del narco de México, encabezó la lista de los hombres más buscados de EEUU después de que Osama Bin Laden fue abatido en mayo de 2011 y la revista Forbes estimó su fortuna en 1.000 millones de dólares.
Tras dos intentos fallidos de arresto —el 13 y el 17 de febrero de 2014 que habían terminado en fugas del capo al último minuto-, el 22 de febrero del año pasado fue arrestado en el puerto turístico de Mazatlán, en su estado natal Sinaloa, en las costas del Pacífico, y permaneció preso poco más de un año hasta su nueva fuga.
