La emisora cita a un testigo, Asad Salomov, vecino del distrito de Karakul, quien vio a los policías locales llevarse a unas 40 mujeres, residentes de un barrio 'de mala fama'.
"Lo vi desde el balcón, los policías formaron a las mujeres, pasaron lista y después las subieron en un autobús y las llevaron al algodonal", comentó.
Las informaciones de que las prostitutas son forzadas a recoger algodón fueron confirmadas por un agente, que habló bajo la condición del anonimato.
"Sí, las hacemos participar en estos trabajos, les decimos que si se niegan vamos a revisar sus expedientes y multarlas", dijo el policía.
Aparte de las mujeres de vida ligera, también los drogadictos y alcohólicos son obligados a trabajar en los algodonales en Uzbekistán.
Una fuente en la Dirección de Policía de la provincia de Bujará explicó que se trata de un "tratamiento educativo", un "trabajo socialmente útil".
En septiembre pasado, las autoridades de la provincia uzbeka de Samarcanda prohibieron celebrar bodas y organizar banquetes en los restaurantes debido al comienzo de la recogida del algodón.
