Previamente se informó que el buque se incorporaría a la Armada antes de que acabe 2015.
"Las pruebas continuarán la próxima semana pero ya están próximas a finalizar", comentó Shaijutdínov a la emisora de radio Ejo Moskvi.
Después de que el barco se integre a la Marina de Guerra –indicó– comenzarán los ensayos de un traje de buceo ruso que permite descender hasta 500 metros de profundidad.
"Mientras tanto utilizamos uno extranjero, los de fabricación nacional permiten descender solo hasta 60 metros de profundidad", apuntó.
Según agregó, los buzos rusos tienen experiencia de descenso a 500 metros de profundidad, pero fue logrado en una cámara barométrica en condiciones de laboratorio.
El buque Ígor Beloúsov podrá acudir en ayuda de submarinos averiados que yacen en el fondo marino o se mantienen a flote, suministrarles aire, energía eléctrica y medios de rescate.
El barco mide 97 metros de eslora, desplaza 5.037 toneladas y tiene una velocidad máxima de 15 nudos. Su autonomía a velocidad económica será de 3.500 millas náuticas.
