En Burgenland, Austria, continúa la operación de traslado de inmigrantes a Viena y más allá al occidente.
Con anterioridad, los medios austriacos informaron citando a la Policía que casi 10.000 refugiados debían llegar a Austria antes de finalizar este sábado.
Sin embargo, la Policía local ofrece unas cifras más modestas.
Esta mañana, más de 6.000 refugiados ya fueron trasladados principalmente a Viena y en parte a Linz en trenes y autobuses especiales.
La ministra del Interior de Austria, Johanna Mikl-Leitner, declaró este sábado que su país no logró ponerse de acuerdo con la parte húngara para que llevara a los refugiados directamente hasta el territorio austriaco en autobuses.
La noche del viernes, las autoridades de Austria, Alemania y Hungría habían acordado dejar de pasar a los refugiados al territorio de Austria y Alemania.
