En declaraciones recogidas por Deutsche Welle, Merkel reconoce el daño de las sanciones para las empresas occidentales, pero aseguró que "debido a las violaciones del derecho internacional y la inestabilidad persistente" las restricciones no pueden levantarse ahora.
Al mismo tiempo, la canciller subrayó que Berlín quiere mantener a Moscú como socio.
El portavoz oficial del Gobierno alemán, Steffen Seibert, a su vez declaró que "nuestra posición respecto a las sanciones es invariable, nadie siente placer imponiendo sanciones".
Según Seibert, las sanciones serán eliminadas solo después de que sean eliminadas las razones que las propiciaron.
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"No se trata de un objetivo en sí, tienen causas políticas y estas se mantienen, tales como la apropiación ilegal de Crimea y la desestabilización del este de Ucrania; por ello mantenemos las sanciones", señaló.
El portavoz añadió que "quisiéramos que llegue el día en que estas causas sean eliminadas y no haya más sanciones, pero por ahora eso no sucede".
En respuesta, Rusia decretó el embargo de algunos alimentos procedentes de EEUU, la UE así como de Australia, Canadá y Noruega, que también se habían unido a las sanciones contra Moscú.
Tema: Rusia responde a las sanciones de Occidente
En junio de 2015 la UE prorrogó las sanciones económicas contra Rusia por un plazo de seis meses.
Rusia también extendió el embargo agroalimentario por un año más.