"El Gobierno Nacional y algunos sectores políticos del Congreso de la República, sin el concurso de las FARC, vienen adelantando de manera caprichosa, iniciativas dirigidas a aprobar mecanismos legislativos con los que se pretende dar cumplimiento" al punto seis del acuerdo de paz, sobre la implementación, verificación y refrendación de lo acordado, señala el comunicado.
Las FARC cuestionan también la eventual creación de un "tribunal especial para juzgar a las FARC", idea surgida de una "reunión entre el Presidente y el Partido Liberal", y recuerdan que el acuerdo sobre el que trabajan ambas partes "no es un mecanismo penal", sino un "sistema integral" de verdad, justicia, reparación y no repetición.
Es este mecanismo, sostiene el grupo guerrillero, "ante el que deberán comparecer todos los actores del conflicto —combatientes y no combatientes- sobre los cuales hubiera acusaciones".
"Es obvio que tales situaciones contravienen el compromiso de que todos los puntos de la agenda deben tratarse primeramente en la mesa de conversaciones" instalada por las partes desde 2012 en La Habana, agregan.
El comunicado advierte que "ninguna" de las iniciativas que el Gobierno presente al parlamento "de forma unilateral", es vinculante para las FARC, "si previamente no han sido consensuadas en la mesa de diálogos", tanto en lo que respecta a sus contenidos, como a los mecanismos de tramitación legislativa.
"Toda iniciativa por fuera de la agenda pactada o de los acuerdos ya alcanzados, constituirían la mejor fórmula para echar por la borda, anticipadamente, el trabajo realizado de mutuo acuerdo por ambas partes", reza el texto.
Las FARC coinciden con el Gobierno en que es necesario "un nuevo proceso constituyente" para implementar los acuerdos de paz, aunque "ello no significa que nos cerremos" a la posibilidad de utilizar los mecanismos "actualmente vigentes" en el marco jurídico colombiano, para de esta manera "darle rango constitucional" a los acuerdos alcanzados en La Habana.
"Somos enemigos de la improvisación y de las supuestas soluciones que desconocen que lo que se debe elevar a norma constitucional, con la correspondiente refrendación popular, es lo acordado en La Habana", agrega el comunicado.
Por su parte, el Gobierno colombiano declaró que las FARC "confunden las dos realidades" de los acuerdos de paz, que deben refrendarse por "obligaciones constitucionales".
"El Gobierno actúa en la mesa para lograr acuerdos; pero corresponde a sus obligaciones constitucionales y a su competencia soberana la búsqueda de los mecanismos para agilizar la adopción de las leyes que se requieran", dijo el jefe negociador del Gobierno colombiano, Humberto de la Calle, en un comunicado enviado a Sputnik Nóvosti por la oficina del Alto Comisionado para la Paz.
"La declaración de hoy de las FARC confunde estas dos realidades", dijo De la Calle, en referencia al comunicado en el que la guerrilla.
En 51 años de conflicto, la guerrilla y el Gobierno se abocaron a varias negociaciones de paz, sin que ninguna diera resultado hasta ahora.
El 20 de julio las FARC dispusieron un cese al fuego unilateral, mientras el Gobierno se comprometió a un "desescalamiento" gradual de las operaciones bélicas, con la suspensión de bombardeos contra las posiciones de la guerrilla.
