"Tsipras está transformándose en lo que era el viejo PASOK. Es un partido que le conviene al 'establishment', por lo que habrá un apoyo por parte de las instituciones y los centros de poder europeos para que ganen", asegura Cutillas.
El experto considera que si hay alguna concesión a Grecia se hará durante la campaña electoral, para potenciar al líder de Syriza que firmó el acuerdo con las instituciones europeas.
El economista cree que durante este mes previo a las elecciones "pueden pasar muchas cosas", por lo que las encuestas realizadas hasta el momento son "poco fiables".
"Según los últimos sondeos, Tsipras mantiene el apoyo de los ciudadanos, pero esas encuestas se realizaron cuando Syriza todavía estaba unida. Ahora, con la escisión de Unidad Popular, las cosas pueden cambiar", explica Cutillas.
Además de la escisión, el experto destaca que Grecia se encuentra en un período de "poca estabilidad" en el que las cosas cambian radicalmente de un día para el otro, por lo que la preferencia política de los griegos puede cambiar de un sondeo a otro.
No obstante, Cutillas cree que Tsipras ganará las elecciones, aunque el nuevo partido "sacará un buen resultado".
El miembro español del Comité de Auditoría de la Deuda Griega cree que Unidad Popular recibirá parte de los votos de los ciudadanos que en el referéndum votaron "oxi" (no) a la austeridad y el memorándum.
"El nuevo partido, Unidad Popular, se opone a los rescates y asume la salida del euro como posible consecuencia, puede recoger parte de esos votos", explica el experto.
Según Cutillas, el 62 por ciento de los helenos que votaron "no" hay que tenerlos "muy en cuenta" de cara a los próximos comicios, porque es un voto "bastante radical".
"La situación era delicada, de mucho riesgo, y aún así la mayoría votó en contra, a pesar de que muchos eran conscientes de que votar en negativo implicaba una salida del euro", afirma.
Según Cutillas, Tsipras adelantó las elecciones de una forma un poco "oportunista" porque sabe que "su popularidad solo irá a la baja".
"Ya vimos como acabó el PASOK, y Tsipras, a mi entender, también va a tener una tendencia negativa", señala el economista.