Es el equivalente de un incremento anual del 1 por ciento en el crecimiento real del PIB a lo largo de los próximos tres años, indican los autores del informe que atribuyen el potencial efecto beneficioso al restablecimiento de los vínculos comerciales entre ambos países y la llegada de capitales iraníes.
Las exportaciones no petroleras de EAU a Irán alcanzaron 12.000 millones de dólares en 2013, o un 12% del total. El grueso de esta suma correspondió a las reexportaciones a través del puerto dubaití Jebel Ali.
"Con sus puertos e infraestructuras, Dubái y EAU probablemente se convertirán en una puerta de entrada a Irán; es el lugar más cómodo para que las empresas multinacionales inviertan en Irán", opina el jefe de la oficina regional del banco de inversión Renaissance Capital, Ahmed Badr.
El representante del banco anticipa la llegada de grandes inversiones procedentes del país persa a Dubái, puesto que "hay mucho dinero en Irán".
Según Badr, las inversiones iraníes beneficiarán a los bancos y al sector inmobiliario de Dubái.