A fines de julio en varias provincias belgas los productores locales de leche y carne de cerdo, inconformes con los bajos precios de ventas de sus productos, bloquearon varias vías automovilísticas y los accesos a varios mercados pertenecientes a redes comerciales.
La Asociación Belga de Productores Lecheros había exigido anteriormente subir el precio de compra para la leche en cuatro centavos de euro, hasta los 29 centavos por litro, con el objetivo de salvar a los lecheros de la quiebra.
Los lecheros franceses también se encuentran en una situación similar.
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Shopges señaló que los políticos "abandonaron" a los agricultores europeos "en esta situación", y "decidieron no reaccionar ante los cambios en el mercado".
"Ya hemos desechado tres millones de litros de leche debido a la reducción de los precios, y ahora se repite la situación de 2009, cuando perdemos 10-12 centavos del precio de la leche", añadió.
"Ellos no llevan a cabo una política que responda a los intereses de los ciudadanos, los agricultores, sino que responden a los intereses de los bancos, los financistas, etc; en las próximas semanas se incrementarán nuestras manifestaciones", concluyó.
Desde hace un año, debido a la posición de la UE que impuso sanciones sectoriales a Rusia y obligó a Moscú a responder con severas medidas, los agricultores europeos no tienen la posibilidad de hacer llegar sus productos al mercado ruso.
El mercado europeo está sobresaturado de productos y a consecuencia de ello, se desploman los precios, afectando al sector.