El exjugador, campeón del mundo en 1982, señaló que se trata de un paso político que refleja cierta lucha que tiene lugar en la organización.
"Creo que la FIBA debe poner orden en sus organismos de base, pero para lograrlo tiene que investigar minuciosamente la situación, en lugar de tomar una decisión semejante desde arriba", señaló.
La Federación Rusa de Baloncesto (RFB) recibió el miércoles pasado una carta del presidente de la FIBA notificando la suspensión de las selecciones rusas de las competiciones internacionales debido a los supuestos escándalos que afectan a la federación nacional.
La suspensión afecta al equipo nacional absoluto masculino, que ocupa el sexto puesto en el ranking FIBA y que se había clasificado para el Eurobasket que se disputa a partir del 5 de septiembre.