"Nos dirigimos a instituciones pertinentes con la petición de extraditar a Palmer a Zimbabue para que sea juzgado por sus crímenes", declaró el ministro de Medio Ambiente de Zimbabue, Oppah Muchinguri, citado por The Guardian.
Muchinguri agregó que las investigaciones muestran que la muerte de Cecil fue el resultado de una caza furtiva "bien organizada y financiada".
Hasta el momento, más de 160.000 personas han firmado una petición al Gobierno estadounidense para que extradite a Palmer y colabore con las autoridades de Zimbabue.
Las fotos del león degollado y su asesino están publicadas en internet, donde Palmer también colgó sus disculpas.
Palmer pagó supuestamente a sus cómplices un total de 55.000 dólares por hacer que el animal abandonara el parque nacional y se pusiera al alcance para matarlo.
El dentista ya ha matado a más de 40 animales, incluidos otros leones, un oso polar y un elefante, según los datos a los que tuvo acceso The Minneapolis Star Tribune.