"La tripulación señaló con un tono bastante enfadado que el avión había casi chocado contra un dron (…) a 2.500 pies (unos 760 metros) de altitud, el dron pasó a unos 100 metros de distancia", dice la nota.
Según The Aviation Herald, los tripulantes indignados dijeron que los controladores aéreos "deben cuidar su espacio aéreo" y que "es realmente peligroso", ante las críticas la torre de control acabó por disculparse.
El Embraer continuó el aterrizaje, tres minutos después del incidente, concluye el portal.