España "ha maniobrado muy mal" desde que el presidente del Gobierno de España José María Aznar impuso en Bruselas la Posición Común y "se ha cerrado las puertas" con Cuba, y solo avanzó en el diálogo durante la etapa del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, cuando se obtuvo la "liberación de presos políticos".
"Hoy los empresarios españoles están muy preocupados por la posibilidad de perder espacios ante los nuevos protagonistas que se incorporan al negocio en Cuba", explica a esta agencia el experto en Latinoamérica.
Una de las pruebas es que la televisión pública española (TVE) "cerró hace un año la corresponsalía en la isla".
Pero Cuba "no necesita a Europa para nada", no es "su prioridad", asegura Medem.
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"Su prioridad en Europa es su relación con Rusia" y el resto de sus relaciones internacionales se centran en "China, Venezuela y América Latina".
Hoy Cuba "tiene un abanico de relaciones diplomáticas más amplio que nunca" y Europa "no tiene importancia" ni "política, ni económica, ni geoestratégica, ni de respaldo político", estima el experto.
Y pone como ejemplo, la visita que el canciller español, José Manuel García-Margallo, realizó a la isla en noviembre del año, la primera en cinco años de un ministro español, y sufrió "la humillación de no ser recibido por el presidente Raúl Castro".
