"Lo puedo calificar como un escándalo, no veo ninguna justificación a lo que hicieron las autoridades finlandesas", dijo la diplomática a la prensa.
Los intentos de Helsinki de explicar su comportamiento no es convincente, afirmó.
Anteriormente, Finlandia denegó la entrada a parlamentarios rusos que figuraban en la lista de personas sancionadas y que pensaban participar en la sesión de la Asamblea Parlamentaria de la OSCE que se celebrará entre el 5 y el 9 de julio en Helsinki.
En respuesta, la delegación rusa rechazó asistir a la reunión.
El Ministerio de Exteriores de Rusia calificó la decisión de Helsinki de "francamente inamistosa".