La prórroga de las vacaciones bancarias pronto puede causar problemas con los pagos por alimentos y medicinas. Como perspectiva un poco más distante se perfila el regreso de Grecia a la dracma y su salida de la eurozona.
La única alternativa a este escenario es aceptar unas condiciones parecidas a las que acaban de rechazar los griegos porque no hay tiempo suficiente para acordar una nueva propuesta del Eurogrupo.
Los acreedores de Grecia pueden elegir entre dos escenarios. El primero es suavizar las condiciones y reanudar la financiación de la deuda griega y el segundo es prepararse a la salida de Grecia de la zona euro. Según el analista del banco Raiffeisen Denis Poryvai, ambos variantes crearían un precedente negativo. "En el primer escenario otros países periféricos pedirían mejorar las condiciones de la ayuda financiera. En el segundo escenario habría alto riesgo de la desintegración de la zona euro.