El documento fue suscrito por el director general de la corporación estatal Rosatom, Serguéi Kirienko, y el presidente del Centro Rey Abdalá de Energía Atómica y Renovable, Hashim Abdullah Yamani.
Este acuerdo define por primera vez en la historia de las relaciones ruso-saudíes las modalidades jurídicas de la cooperación nuclear.
En particular, el acuerdo prevé crear un comité coordinador para consultas sobre el uso pacífico de la energía nuclear, poner en marcha grupos de trabajo para realizar proyectos e investigaciones científicas, intercambiar expertos e información, organizar reuniones y fomentar la formación de investigadores y de especialistas.