"La visita tendrá lugar según lo previsto en debates anteriores", dijo el portavoz.
El portavoz no precisó qué acuerdos se prevé firmar durante el SPIEF entre Rusia y Grecia, pero señaló que se trata de documentos que fueron discutidos durante el reciente encuentro del primer ministro griego con el presidente de Rusia, Vladímir Putin.
Por su parte, el primer ministro griego declaró que el deseo de su Gobierno de resolver el problema de la deuda es considerado por los acreedores como una muestra de debilidad y se utiliza para seguir insistiendo en la reducción de los salarios y las pensiones.
Tsipras manifestó a los medios que su país espera que los acreedores "vuelvan a ser realistas".
"Solo una voluntad política premeditada puede explicar la insistente exigencia de los acreedores de nuevos recortes de las pensiones después de cinco años de desfalcos", aseguró Tsipras.
El primer ministro griego considera que su Gobierno no parte de una ideología, sino que pretende defender la dignidad de su pueblo y la esperanza de otros países de Europa.
"No se trata de una cuestión de fanatismo ideológico, es una cuestión de democracia: no tenemos derecho a enterrar la democracia europea justo en el sitio donde surgió", subrayó.