"Hoy por hoy, aunque parezca paradójico, la confianza mutua entre EEUU e Israel no esta en su máximo nivel, ya que al desencadenar este escándalo con el virus, Tel Aviv ha dado a entender que no le basta solo la información que recibe de su aliado del otro lado del océano", señaló el experto.
Entre los objetivos de esta campaña estarían también las conversaciones del Grupo 5+1, por lo que la compañía habló de "intereses geopolíticos" detrás del ataque.
Sheijoleslam subrayó que no hay dudas de que los estadounidenses comparten con Israel datos sobre esas negociaciones.
Sin embargo, resaltó, es obvio que la inteligencia hebrea "olfatea por su cuenta información secreta, literalmente bajo las narices de los norteamericanos".
Este trabajo, afirmó, no le ha dado el resultado previsto a los israelíes.
"El Mossad no ha descubierto nada nuevo en Viena".
Además, evocó que Teherán ya hizo frente en el pasado a amenazas de este tipo.
"Irán reaccionó al ataque con el virus Stuxnet en 2010 con un refuerzo de sus propias cibertecnologías y hoy los sistemas antivirus del país funcionan mejor y sin fallos", remarcó.
La historia del nuevo virus, sostuvo, es una especie de llamado a Irán y al Grupo 5+1 (los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania) a estar alertas y seguir trabajando hasta la firma de un acuerdo universal.
Por otro lado el analista Emad Abshenas ha opinado que es complicado encontrar una explicación lógica a las acciones de los servicios secretos hebreos.
"Desde un principio se suponía que la inteligencia israelí iba a espiar las conversaciones de Irán con el Grupo 5+1, por esta razón tanto Irán como EEUU tomaron medidas para evitar que se filtren detalles de las negociaciones", indicó.
Según sus palabras, los estadounidenses de todos modos entregarían a los israelíes toda la información requerida.
Además, dijo, no tiene sentido buscar información secreta en la etapa final de las conversaciones.
"Toda esta historia debe ser vista como un chantaje por parte de Israel con el fin de tensar la situación en el momento decisivo de las negociaciones", señaló.
Abshenas cree que con todo esto Tel Aviv busca demostrar que está al tanto de lo que se debate en las conversaciones sobre el programa nuclear iraní.
"Sin embargo, ello no debe inquietar a los negociadores", sostuvo.
El miércoles la empresa rusa de seguridad informática Kaspersky Lab anunció haber descubierto un nuevo virus espía Duqu 2.0 con el que han sido atacados tres hoteles sedes de las conversaciones del Grupo 5+1.
Kaspersky supuso que este ataque, "cuidadosamente planeado y ejecutado", fue financiado por un Estado, sin precisar cuál.
La revista The Wall Street atribuyó la autoría a los hackers de Israel.
