La XXIII edición de esta manifestación ha coincidido con la celebración cristiana del Corpus Cristi y tenía por título "Exaltando al Rey de Reyes".
El objetivo era unir a todas denominaciones evangélicas del mundo en torno a la creencia en Jesucristo –la Iglesia Católica no ha participado en el evento-- aunque no han faltado proclamas de carácter político y social.
Los portavoces de la Iglesia Renacer en Cristo han sido de los primeros en decir que era necesario rezar por las autoridades del país, y han citado a la presidenta Dilma Rousseff (Partido de los Trabajadores) y al gobernador del Estado de Sao Paulo, Geraldo Alckim (Partido de la Social Democracia Brasileña), según apunta el diario Folha de Sao Paulo.
Evangélicos oram por fim da corrupção em Marcha para Jesus http://t.co/JHpyuLUcSj pic.twitter.com/ia0jeJy3nP
— Estadao (@Estadao) 4 июня 2015
Algunos manifestantes han ido más allá, con carteles en contra del aborto y a favor de una "limpieza ética" en el país, que consideran corrompido por la pérdida de los valores que tienen que ver con la familia tradicional, así como por los notables casos de corrupción que afectan a la clase política.
En cualquier caso, el tono general ha sido de exaltación de la fe más que de reivindicación política, como en el caso de la jubilada Eva Miranda, emocionada por el ambiente que se respiraba.
"Se siente en el aire, siento que mi corazón me lleva. Es una bendición", decía, y aseguraba que estaba en la marcha exclusivamente por su amor a Jesús.
La presencia de políticos y figuras públicas ha sido más discreta que en la otra Marcha por Jesús que se celebró la semana pasada en Río de Janeiro, y donde sí se pudo ver al presidente de la Cámara de los Diputados, Eduardo Cunha (Partido del Movimiento Democrático de Brasil) y al ultraderechista Jair Bolsonaro (Partido Progresista), que lanzaron sus dardos contra el matrimonio homosexual.
Según la Policía Militar (PM) en la caminata de Sao Paulo han participado unas 340.000 personas, mientras que los organizadores no han querido divulgar datos de participación, aunque sí han asegurado que la asistencia ha sido mayor que el año pasado, cuando acudieron unas 200.000 personas.
Los actos continuarán hasta tarde con conciertos de góspel y otras actuaciones musicales.