"Los fondos asignados superan cuatro veces el monto previsto inicialmente, porque se ha decidido adquirir no cinco sino diez instalaciones de radar", reveló el diario que cita fuentes del departamento militar checo.
Los nuevos radares serían adquiridos de Israel en el formato de negociaciones gobierno-gobierno, para evitar así posibles casos de corrupción.
Ese formato ya se utilizó en las negociaciones sobre el arriendo a Suecia de cazas Saab JAS-39 Gripen y demostró su eficacia.
De acuerdo a una de las fuentes, los radares israelíes son más caros que, por ejemplo, los estadounidenses, pero a cambio destacan por una mayor calidad.
El año pasado, la multinacional estadounidense Lockheed Martin cabildeó en Praga la compra de sus radares.
El Ministerio de Defensa checo espera recibir los primeros radares israelíes en 2017.
