Explica Bernabeu que ante la falta de respuesta a la petición de extradición realizada por la fiscalía chilena a las autoridades estadounidenses, la familia de Jara contacta con la CJA y juntos deciden presentar una demanda civil en los tribunales de Florida.
Según la abogada, "Barrientos, inicialmente, no se quiso defender, se le notificó la demanda y no se presentó, y estábamos dispuestos a acudir a unas audiencias por daños, diseñadas para cuando el imputado no responde, porque lógicamente él no quiere volver a Chile, tiene miedo de que le extraditen, que la demanda acarree la extradición, aunque no esté vinculada directamente, y al final ha decidido defenderse y vamos a juicio".
Cuando los abogados de Barrientos presentaron un recurso, alegando que la demanda debería de ser desestimada al haber transcurrido el plazo de prescripción, que según la ley es de diez años, "el juez decidió favor de la familia de Víctor Jara, alegando que la vinculación al crimen de Barrientos sólo se sabe desde el año 2009, como consecuencia de la investigación en Chile, y por tanto el plazo de diez años que prevé la ley norteamericana debe empezar a contarse desde el 2009, y ahora que hemos ganado el que quizá era el recurso más delicado, vamos a juicio".
"Es por eso", dice, "que la familia siempre quiso recordar el trabajo de Víctor Jara, en un momento además donde en Latinoamérica y otras partes del mundo hay transformaciones muy serias, con gobiernos progresistas y presidentes y presidentas que han sufrido torturas, y Jara siempre quiso recuperar la voz y la dignidad de los pobres, los campesinos y los trabajadores".
"Esta demanda civil", al fin y al cabo, "se dirime en una corte con un juez entrenado en lo penal, y aunque el magistrado sólo pueda imponer una pena económica el manejo del caso es prácticamente igual que uno penal, y eso expondrá al asesino, si demostramos su culpa y su participación, y le estaremos regalando a EE.UU la prueba que necesita para extraditarle".
Con la posible extradición de Barrientos "EEUU demostrará que ha madurado, que es consciente de la presencia de violadores de derechos humanos en su territorio, que quiere jugar un papel más activo e ir a por ellos, y ya sólo falta que respete a los otros países que desde hace años están haciendo lo mismo".