El 9 de mayo la capital de Letonia, Riga, y otras grandes ciudades de esta república báltica acogieron actos conmemorativos por el 70 aniversario de la derrota del nazismo en la II Guerra Mundial.
"Al mismo tiempo, los políticos letones mostraron una reacción inadecuada al afirmar que el 9 de mayo es el inicio de una segunda ocupación soviética", dice la nota del ministerio ruso.
Es más, las autoridades de la ciudad de Jelgava prohibieron a la población de habla rusa celebrar los tradicionales actos festivos y organizar conciertos.
"En vez de ello, la asamblea legislativa urbana convocó una ceremonia de colocación de flores en el monumento a los legionarios letones de la Waffen SS nazi", señala el comunicado.
El hecho de que la Unión Europea no haya condenado esas acciones hace pensar que Europa no ha aprendido bien las trágicas lecciones de la II Guerra Mundial, concluye la Cancillería rusa.
