Uno de los dos supervivientes de la tragedia relató que el aparato tuvo varios fallos en el motor, poco después de despegar, pero que se decidió seguir con el vuelo de pruebas.
El militar superviviente, que sigue estable dentro de la gravedad, habría pasado esta información a su compañía y al ministerio de Defensa.
La ministra de Defensa alemana, Ursula Gertrud von der Leyen, durante un acto este fin de semana en Francia para conmemorar el final de la Segunda Guerra Mundial, habría hecho una reunión informal con sus colegas francés y británico para valorar la situación en que queda uno de los proyectos de Defensa más importantes de Europa, tras el accidente en el sur de España.
Tras este encuentro, Leyen ofreció de forma pública a España y a Airbus su apoyo, dado "el importantísimo papel que juega para los intereses europeos la renovación de las capacidades de transporte aéreo".
Los trabajadores de Airbus en España mantuvieron este mediodía cinco minutos de silencio en memoria de sus compañeros muertos.
El programa del Airbus A400M podría suspenderse hasta que se conozcan exactamente las causas del accidente en Sevilla.
Hay más de 1.000 personas que dependen de este programa y más de 8.000 que trabajan para esta industria en Andalucía, unos puestos de trabajo que tras el siniestro se podrían ver afectados.
Varios países ya han confirmado la paralización de los vuelos de aviones de transporte militar de características similares al accidentado.
"Hemos dejado en tierra los nuestros hasta que sepamos más", afirmó el ministro malasio, en un mensaje publicado en su cuenta oficial de la red social Twitter.
El A400M es el avión militar de hélice más grande del mundo. Su producción industrial empezó en 2011.
El proyecto nació en 2003 tras el acuerdo alcanzado por siete países (Alemania, Francia, España, Reino Unido, Turquía, Bélgica y Luxemburgo) que se comprometieron a comprar 180 unidades con una inversión inicial de 20.000 millones de euros.
Airbus había decidido hace alguna semanas centralizar en Sevilla toda la gestión operativa de este modelo, que hasta el momento estaba dividida entre Hamburgo y Toulouse.
España preveía comprar 27 aeronaves de este modelo y la primera entrega estaba prevista para inicios del próximo año.
Con esta compra, el Gobierno de España buscaba reemplazar los aviones estadounidenses de transporte táctico Hércules C-130, en servicio en el Ejército del Aire desde 1973.
El fatídico accidente ocurrió el pasado sábado por la mañana. Nada más despegar, se avisó a la torre de control porque percibieron problemas de vuelo, pero inmediatamente el aparato se estrelló contra una torre de alto voltaje, explicaron fuentes oficiales.
Una de los primeros testigos que llegaron a la zona del siniestro aseguró que "casi todo el avión ha quedado convertido en cenizas".