La supuesta "confesión" de Lula se habría producido, según el libro, en 2010 en Brasília en una reunión del presidente brasileño con Mujica y su vicepresidente, Danilo Astori, en la que Lula habría reconocido que tuvo que "lidiar con muchas cosas inmorales y chantajes" pero que "era la única forma de gobernar el país".
Sin embargo, la publicación deja claro el concepto inalterado de Mujica hacia su compañero brasileño tras su confesión al decir que "Lula no era un corrupto como Collor de Melo y otros expresidentes brasileños" y que sintió la "necesidad de aclarar su situación", una muestra de que el uruguayo habría entendido perfectamente que Brasil era un país que "nadaba en la corrupción".
El "Mensalao" está considerado el mayor escándalo de corrupción de la historia de Brasil, su irrupción en 2005 hizo tambalear el gobierno de Lula da Silva que siempre negó tener cualquier conocimiento de la trama de compra de votos a diputados del Congreso Nacional a cambio de apoyo para los proyectos del Partido de los Trabajadores (PT).
El lanzamiento del libro, que todavía no ha sido presentado en Brasil, podría tener nefastas consecuencias para la popularidad del gobierno brasileño en medio de la crisis provocada por el escándalo de Petrobras, que si bien no ha afectado al Ejecutivo, provocó el encarcelamiento del extesorero nacional del PT, Joao Vaccari Neto.