"Resulta asombroso que se haya logrado conservar este documento", declaró al diario el historiador Tom Lamb, encargado de las ventas en Bonhams.
Esto se debe a que muchos documentos importantes fueron quemados tanto por los propios alemanes como por los representantes de las fuerzas aliadas.
"Los alemanes tenían una política de tierra quemada, ya que al retirarse quemaban todo lo que podían", dijo.
Von Greim, que huyó a Praga y fue arrestado por militares de EEUU, llevaba en su equipaje el famoso documento, que quedó en manos del oficial que lo estuvo interrogando.
Posteriormente lo adquirió un coleccionista, quien lo ha puesto en venta recientemente.
El jefe de la Luftwaffe debió haber sido intercambiado durante un canje de prisioneros con el Ejército Soviético, pero prefirió suicidarse ingiriendo cianuro.
La suerte de Dönitz, quien encabezó el Tercer Reich por orden del propio Hitler, tuvo una suerte menos trágica, pues recibió una condena de 10 años de prisión en el tribunal de Nüremberg y pasó el resto de su vida en Alemania Occidental.
En 1980 a la edad de 89 años el autor del telegrama en venta falleció de muerte natural.