En particular en la localidad de Mirónovsky (a 56 kilómetros de Donetsk), controlada por Kiev, los representantes de la misión registraron 20 explosiones que calificaron como resultado de bombardeos de lanzamisiles múltiples Grad, así como tres disparos de morteros de 120 mm.
En la localidad de Mayorsk (a 41 kilómetros de Donetsk), controlada por el Ejército, registraron 10 explosiones que calificaron como disparos de morteros.
Además, los observadores escucharon dos disparos correspondientes a los del cañón antiaéreo ZU-23, así como hasta 25 explosiones considerados como ataques de obuses autopropulsados.
Cerca de la localidad de Sajanka (a 95 kilómetros de Donetsk), controlada por las milicias, encontraron un cráter supuestamente causado por el impacto de un proyectil de 152 mm.
La MEO concluyó que se observa el aumento de casos de violación de la tregua en la provincia de Donetsk, especialmente cerca del aeropuerto de Donetsk.
El repliegue de armamento pesado, así como el armisticio general, son unos de los requisitos clave para el arreglo de la crisis ucraniana, acordados en Minsk por el Grupo de Contacto (OSCE, Ucrania y Rusia) y los líderes de Alemania, Francia, Rusia y Ucrania.
En concreto, se estipuló que los dos bandos retiren la artillería pesada a una distancia de entre 50 km y 140 km, en función del alcance, con el objetivo de crear una zona de seguridad.
Tanto Kiev como las repúblicas autoproclamadas afirman haber concluido la retirada del armamento.