"Un coleccionista judío fue forzado en 1942 a entregar el cuadro "El bosque de La Haya con vistas al palacio Huis ten Bosch", de Joris van der Haagen al banco Lippman, Rosenthal & Co en Ámsterdam", explica el informe en la web del Palacio Real.
El descubrimiento se produjo a raíz de una investigación independiente sobre obras adquiridas por la familia real tras la llegada al poder del partido nazi en Alemania en 1933.
Tras la ocupación nazi de los Países Bajos, según se reveló, la pintura fue hallada en posesión de un marchante holandés, a quien la reina Juliana se lo compró en 1960 sin conocer la historia del cuadro.
Una asociación de arte real entró en contacto con los descendientes del primer propietario para restituir la pintura, informó el Palacio Real.
El resto de detalles no se acabaron por revelar.