"Considero que la situación actual en estos países es resultado de la política de EEUU, que condujo a circunstancias que invitan a preguntar si estos países sobrevivirán", expresó Primakov, quien también fue primer ministro de Rusia.
El experto destacó que la coalición contra el Estado Islámico (EI), liderada por EEUU, no es suficiente para acabar con ese grupo yihadista.
Lo principal, en opinión del experto, es "la participación real de aquellos países de los que llegaron los voluntarios (yihadistas)".
El EI, indicó, es también un peligro por los países del espacio post-soviético, Rusia inclusive.
Además de la financiación, "según algunos datos, 1.500 voluntarios de los antiguos países de la Unión Soviética combaten bajo la bandera de este grupo terrorista", advirtió.
La principal amenaza no es la participación de esos combatientes en las operaciones del EI, sino su futuro regreso a los países de origen.
"Ello alimentará las amenazas terroristas regionales", enfatizó.
Primakov llamó también la atención al hecho de que "últimamente se va diluyendo EI mismo" y "a la par con la persistente contradicción entre suníes y chiíes aparecen nuevos centros y nuevos lemas de lucha para implantar califatos en los territorios conquistados".
Preguntado por la creciente influencia de Irán en Yemen, Siria, Irak y el Líbano y la posible reacción árabe, el experto ruso no dudó en afirmar que Irán llegará a ser un "participante activo" de la lucha contra el EI.
En cuanto a Siria y los intereses de Rusia en ese país, destacó que para Moscú es importante que "la situación interna de Siria sea resuelta precisamente como una situación interna", y no dudó de su capacidad de "conseguir por métodos políticos la estabilidad y la tranquilidad del país".
El califato islámico de EI –grupo yihadista que controla amplios territorios de Siria e Irak y tiene en sus filas hasta 30.000 combatientes, según la CIA– es desde 2014 uno de los mayores retos globales.
Diversos grupos terroristas en Libia, Egipto, Afganistán y Nigeria juraron lealtad al EI.
