"Se podrían introducir modificaciones", afirmó.
"Si se nos considera un enemigo, es poco probable que podamos continuar cooperando como si no pasara nada", dijo Ulianov.
Afirmó a la vez que la suspensión de la participación de Rusia en el Tratado sobre las Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (FACE) no modificará la situación militar y política en Europa.
También indicó que Moscú está dispuesto a participar en negociaciones para elaborar un nuevo convenio "basado en los principios de igualdad" pero subrayó que por el momento no percibe medidas prácticas en esa dirección por parte de sus socios occidentales.
El martes Moscú anunció que ya no participaría en las reuniones del Grupo Consultivo Conjunto del Tratado FACE y que rompía definitivamente con el acuerdo, cuya aplicación había suspendido en 2007.