Anteriormente se informó que rebeldes del grupo EI habían liberado a los rehenes asirios secuestrados en la provincia de Hasaka en el noroeste de Siria.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, citando fuente de los insurgentes cristianos, informó que los extremistas "liberaron a los rehenes después de la plegaria del viernes", pero por el momento ninguno de los feligreses cristianos que recuperaron su libertad ha podido abandonar los territorios controlados por el EI.
"Desgraciadamente la información que ha llegado a través de la ONG de DDHH sobre la liberación de nuestros hermanos es en un 80% falsa, les hemos llamado a Hasak, ellos no tienen ningún dato, ninguna persona ha vuelto por el momento" comunicó el sacerdote.
Los extremistas secuestraron a unas 200 personas, pero la cifra exacta resulta confusa, ya que mientras el arzobispo sirio, Jacques Behnan Hindo, sostiene que se trata de 250 cristianos, las fuentes asirias aseguran que cifra total de rehenes es de más de 300.
En Hasaka vive la mayor parte de los asirios de Siria, una minoría étnica que también habita en Irak y Turquía.
Se calcula que Siria contaba antes del inicio de la guerra con unos 200.000 asirios, de los que permanecen en el país menos de 20.000.
Su idioma, el asirio, es una combinación del acadio –antigua lengua de Mesopotamia– y el arameo.
Algunos hablan de manera habitual en árabe, pero usan el asirio en familia y para las misas.
Los asirios son cristianos de las iglesias caldea, siriaco-ortodoxa y asiria del Este.
