El parlamentario europeo, que ha convertido el control de la inmigración en cruzada ideológica de su formación euroescéptica, se siente reivindicado por las proyecciones sobre el nivel de extranjeros publicadas hoy en un informe de la Universidad de Oxford.
El Observatorio de la Migración de la Universidad de Oxford calcula en ocho millones el número de nacidos en el extranjero que residían en Inglaterra en 2014.
De acuerdo con el estudio, medio millón de emigrantes se asentaron en las regiones inglesas en la presente legislatura, con un incremento del 8% desde 2010.
“Se ha probado una vez más que UKIP tiene la razón”, señaló el líder de un partido que fomenta el miedo a la transformación del país en “tierra de extranjeros”.
Farage advirtió hoy que los datos de la Universidad de Oxford confirman “que la migración es insostenible” y ha de ser controlada con “un sistema de puntos al estilo australiano”.
UKIP propone limitar la entrada de extranjeros, incluidos los procedentes de la Unión Europea, en función a baremos de educación y talento profesional.
Londres es la ciudad más receptora de inmigrantes, con un total estimado en 3,1 millones de individuos en 2014.
Sin embargo, el ritmo de crecimiento de la población no nacida en Reino Unido fue más pronunciado en el noreste inglés, donde se concentran factorías de procesado de alimentos que atraen a trabajadores sin altas calificaciones profesionales.
Esta región experimentó una subida del 44% de residentes comunitarios y del 12% de ciudadanos de fuera de la UE en los últimos cuatro años.
Farage ha convertido la inmigración y la salida del Reino Unido de la UE en los principales ejes de su campaña hasta las elecciones generales del próximo mayo.