"Debemos seguir adelante y considerar lo sucedido en Debáltsevo no como un fracaso de los acuerdos sino como una infracción, a pesar de haber costado muchas vidas", dijo Tagliavini en su intervención en la sesión de la Asamblea Parlamentaria de la OSCE dedicada a Ucrania.
Debáltsevo, un nudo ferroviario de importancia estratégica para la conexión entre Donetsk y Lugansk, fue escenario de encarnizados combates entre las milicias y las fuerzas de Kiev.
Miles de militares ucranianos se vieron atrapados en una bolsa en esta zona hasta que el pasado miércoles la resistencia cesó y la ciudad pasó a estar bajo control de los milicianos.
Una semana antes, el 12 de febrero, concluyeron en Minsk las negociaciones de los líderes de Alemania, Francia, Rusia y Ucrania.
El Grupo de Contacto para encontrar una solución a la crisis ucraniana aprobó un documento que estipula el alto el fuego en Donbás, la retirada de las armas pesadas y la creación de una zona de seguridad.
El alto el fuego entró en vigor el 15 de febrero y se ha respetado en general, menos en la región de Debáltsevo.