Anteriormente, el Ministerio de Exteriores argentino pidió a EEUU incluir este asunto en la agenda de las conversaciones entre el grupo 5+1 (los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania) y Teherán.
"El temario de las conversaciones sobre el programa nuclear iraní está determinado con claridad y no admite discusiones de otros asuntos", dijo Afkham en una rueda de prensa en la capital iraní.
El incidente es un problema interno de Argentina e Irán condena cualquier intervención en el asunto por parte de otros países, indicó la portavoz, citada por la agencia Fars en su página oficial.
El atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) perpetrado en 1994 fue el mayor ataque en la historia de Argentina y se cobró 85 vidas.
Las autoridades argentinas acusaron a varios funcionarios iraníes de estar implicados en el acto terrorista, incluido el expresidente de Irán, Akbar Hashemí Rafsanyaní.
Irán a su vez niega rotundamente todas las acusaciones.
El autor de la denuncia y principal investigador de la causa AMIA, el fiscal Alberto Nisman, acusó a la presidenta argentina Cristina Fernández y al canciller argentino, Héctor Timerman, de un supuesto complot oficial para encubrir a los responsables del atentado a cambio de beneficios comerciales con Irán.
Más tarde, Nisman apareció muerto de un tiro en la cabeza junto a un arma de fuego en su departamento, días después de presentar el caso contra los funcionarios ante un juez federal.