Gracias a esta decisión, Brasil permitirá la comercialización e importación de los productos medicinales que contengan cannabidiol, un compuesto especialmente efectivo a la hora de tratar enfermedades como la epilepsia, esclerosis múltiple, esquizofrenia, dolores crónicos y para la detención del crecimiento de las células cancerígenas.
"La reclasificación por sí misma no altera el cuadro de necesidad excepcional de autorización de la ANVISA", recuerda el director del organismo, Jaime Oliveira, quien se mostró desde el inicio a favor de la liberación del medicamento ya que los estudios demuestran que, a diferencia del tetrahidrocannabinol (THC), no genera dependencia ni efectos psicoactivos.
Solamente desde el pasado martes, el organismo recibió 374 solicitudes de importación del CBD para uso médico personal de los que 336 han sido autorizados y 31 esperan ser autorizados por los técnicos del ANVISA tras revisar el cumplimiento de los requisitos de los pacientes.
La autorización del CBD en Brasil llega tras la sentencia favorable el pasado mes de abril de la Justicia del país tras el caso de una niña de 5 años, Anny Fischer, afectada por un síndrome que le produce una media de 80 convulsiones incontrolables por día y cuyos padres, Katiele y Norberto Fischer, se lanzaron a una labor de concienciación en todo el país para la legalización del uso medicinal de derivados del cannabis en Brasil.
