La economía de Ucrania está al borde de la catástrofe, opina el ex primer ministro en funciones, Serguéi Arbúzov, actualmente colaborador del Centro de Investigación del Desarrollo Económico y Sociocultural de los Países de la CEI, Europa Central y Oriental.
"Hace un año había muchos problemas, pero lo que hay ahora no se puede calificar de problemas, sino que se trata de una verdadera catástrofe. Una catástrofe económica y humanitaria. Esto lo viven diariamente millones de personas comunes y corrientes", lamentó Arbúzov.
Las pérdidas económicas y de prestigio que sufrieron Rusia y la Unión Europea, a su juicio, no se comparan con lo que Ucrania experimenta y que para poder regresar al nivel económico de 2013, se necesitarían muchos años.
"Puede que Rusia o la Unión Europea tengan problemas de imagen y puede que pierdan un par de puntos porcentuales en el PIB por las sanciones mutuas, pero en nuestro país la situación es tal que necesitaremos muchísimo tiempo para recuperar el nivel (económico que teníamos en) 2013".
Actualmente Ucrania sufre de serios problemas con la generación eléctrica. Al país lo afecta un déficit de carbón para las centrales termoeléctricas, mientras que la temperatura en este invierno es menor que lo habitual. Todo esto en un ambiente de profunda crisis política, que repercute gravemente en la economía y el ámbito presupuestario, lo que deja al país prácticamente al borde del impago de deudas.
El gobierno pronostica que en 2014, la economía se contraerá en un 5%, mientras que el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, no descarta una contracción del 7%, la misma cifra pronosticada por el Banco Nacional de Ucrania. El Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo cree que el PIB ucraniano disminuirá en un 7%; y la agencia Fitch, en un 5%.
